El egipcio perdió la Premier League frente al Manchester City, pero avisó de su ambición y la del Liverpool a través de Twitter. “Aún no se ha acabado”, escribió.
El futbolista egipcio publicó una imagen en sus redes sociales con los premios a máximo asistente de la Premier League, con 13 pases de gol, y la Bota de Oro, que compartió con 23 tantos con Heung-min Son, del Tottenham Hotspur.
Anfield llegó a pensar que el Aston Villa había conseguido el empate, pero fue solo un rumor. El Liverpool hizo tarde su trabajo, pero lo hizo, ganando al Wolverhampton para acercarse a la conquista de la Premier League. Los reds remontaron, pero también lo hizo el Manchester City dejando el título en el Etihad.
Uno de los protagonistas de la tarde fue Mo Salah. El egipcio celebró su gol creyendo ser definitivo pare el título, pero todo se torció con el resultado en Mánchester. La fiesta se canceló en Anfield, el cuatro de cuatro se quedó en aspiración para una nueva temporada y, encima, este se llevó dos trofeos agridulces a casa: el de mejor asistente y el de máximo goleador de la temporada.
Después de este duro golpe, al Liverpool le queda el partido del año: la final de la Liga de Campeones frente al Real Madrid del 28 de mayo. Precisamente, el mismo Salah ha querido centrar la atención desde el primer momento. Aún desde el césped del Estadio de la Cerámica, el delantero pidió al Real Madrid y, remontada mediante, su deseo se cumplió.
