El Real Madrid cosechó la primera derrota de la temporada ante el Leipzig (3-2) en la Champions League. Una derrota que dejó a varios futbolistas señalados. El conjunto blanco afrontaba el encuentro con ausencias importantes. Karim Benzema, Luka Modric y Fede Valverde se quedaron en Madrid por lesión. A estas bajas se sumaron las rotaciones decididas por Carlo Ancelotti. El técnico italiano decidió dar un respiro a Dani Carvajal, David Alaba y Ferland Mendy, lo que significó que el equipo merengue jugara con una defensa nueva. Y por ahí se fraguó la primera debacle de la temporada.
El Real Madrid encajó por primera vez tres goles esta temporada y nada más acabar el encuentro fue el propio Thibaut Courtois el que apuntó a sus compañeros de retaguardia. “Como muchas veces salimos dormidos, sin agresividad, sin intensidad… No puede ser que nos metan dos goles en dos córners. No puede ser que defendamos mal el primero y volvamos a defender mal el segundo”, se quejó el internacional belga. Y así fue. El Real Madrid encajó dos goles en cinco minutos que le obligaron a remar contracorriente muy pronto.
Marco Asensio perdio la marca de André Silva en el primero de esos saques de esquina y Tchouaméni dejó el balón muerto a Nkunku en el segundo. La zaga hizo aguas por las dos bandas. Nkunku, Simakan y Haldara hicieron estragos a la espalda de Lucas Vázquez y, muy especialmente, de Rüdiger, que sufrió cada vez que le tocó correr hacia atrás. Tan evidente era el agujero que Carlo Ancelotti rectificó la posción del alemán y envió a Nacho a arreglar el desaguisado en ese lateral izquierdo.