Tras la derrota con el Nápoles en el Olímpico, la Roma levantó cabeza enseguida, consiguiendo en Verona una victoria que le coloca en el cuarto puesto, superando a Inter y Lazio justo antes del derbi.Fue un triunfo importante y complicado para los giallorossi, que tiraron en el comienzo del partido una enorme oportunidad para ponerlo cuesta abajo.
A sus 18 años, Cristian Volpato devolvió la confianza que José Mourinho depositó en él con un gol en el minuto 88 y una asistencia en el tiempo añadido que desatascaron a una Roma plagada de bajas, y de nuevo con muchos problemas de cara a puerta, ante un Hellas Verona (1-3) en puestos de descenso que complicó sobremanera el partido a los ‘giallorossi’, que de nuevo ocupan la cuarta plaza.
En una semana en la que se juega su clasificación a la siguiente ronda en Liga Europa y en la que se mide con la Lazio en el derbi de la capital italiana, la Roma sufrió para superar el entramado defensivo de un Verona que acabó encerrado en área propia, renunciando al balón y despejando cualquier tentativa de la ‘Loba’, peleando por el punto que hasta los últimos compases tuvo en su mano.
Y es que el conjunto local se adelantó en el marcador gracias al gol de Dawidowicz, favorecido por un rebote que complicó la estirada de Rui Patricio.
Abraham, una vez más, confirmó su momento difícil acabando un contragolpe con un regate al portero rival Montipó y un disparo al poste, solo ante la portería vacía. Poco después, los locales abrieron la lata con Dawidowicz, que golpeó un disparo desde la frontal de Faraoni y engañó así a Rui Patrício. La alegría del polaco duró muy poco porque, en el minuto 36′, el árbitro lo expulsó (con la ayuda del VAR) por una dura entrada sobre Zaniolo.
El italiano, siempre muy activo, puso las tablas instantes antes del descanso, aprovechando otro disparo al poste de Abraham que se convirtió en una gran asistencia.En superioridad numérica, Mourinho sacó la artillería pesada, reforzando la delantera con El Shaarawy, Belotti y Volpato, y poniendo también a Matic, autor de su mejor actuación como romanista.
El serbio, aún en condiciones precarias, golpeó el larguero con un cabezazo y asistió a Volpato, que con 18 años pudo celebrar ya su segundo gol como romanista gracias a un preciso disparo desde el límite del área en el 88′. El primero también lo había anotado justo ante el Verona.Los locales se volcaron al ataque, pero en el descuento El Shaarawy firmó la sentencia con una vaselina a pase del mismo Volpato. Su tarde fue inolvidable.
