El PSG es consciente de que necesita un impulso, una inyección de adrenalina y un sostén que le de alas para afrontar el tramo más importante de la temporada. El club organizó este viernes, por primera vez desde que está bajo la gobernanza de Qatar, un entrenamiento en el Parque de los Príncipes abierto al público a dos días de viajar a Marsella para disputar un encuentro trascendental por el título de la Ligue 1.
La sesión, que arrancó a las 17 horas, fue todo un éxito. Más de 30.000 aficionados, récord para un club francés, llenaron las gradas del Parque de los Príncipes, en medio de un entrenamiento que comenzó con una vuelta de honor de todos los jugadores presentes para fortalecer todavía más la unión con sus hinchas.
Antes del comienzo, la Virage Auteuil, el grupo ultra del PSG, mostró una pancarta en la que se pidieron “que no se repitiera por segunda vez” la debacle del Bernabéu la temporada pasada. El 8 de marzo, los parisinos viajan a Múnich para medirse al Bayern en la vuelta de los octavos de final de la Champions, una eliminatoria en la que parte con ventaja el equipo bávaro después de conquistar por la mínima el Parc el pasado 14 de febrero.
El PSG venía incidiendo en la importancia de la afición para superar el bache, y esta ha respondido con creces. El primer entrenamiento con público desde que el club está en manos de Qatar Sports Investments puede calificarse como un éxito rotundo. Los futbolistas han respondido con una vuelta de honor al apoyo de sus aficionados. Ambas partes son conscientes de que las visitas a Marsella y Múnich son claves en la consecución de los objetivos más inmediatos.
