De pronto la rumorología se desató. Cuestión de un click. De un follow. Pero de quién para quién. João Félix comenzaba a seguir anoche, con su futuro en el aire, la cuenta oficial del Galatasaray. La mecha de la esperanza turca queda inaugurada. Es el tercer equipo de fútbol, por cierto, al que el Menino sigue en su Instagram. Los otros tres, claros, los tres en los que ha jugado: Benfica, Atlético y Chelsea. El cuarto, desde anoche, el Gatalasaray.
Tiene el Atlético un problema serio con Joao Félix, quien una vez finalizada su cesión al Chelsea debe regresar a Madrid este verano. Desde el club le buscan salida porque preferirían hacer caja con él para firmar a otros jugadores, pero no será fácil encontrarle acomodo porque el luso acepta salir, pero no a cualquier sitio.
Es la patata caliente que espera a Simeone a la vuelta de vacaciones. Lo ideal sería encontrar una solución antes para evitar el reencuentro entre el argentino y el ‘menino’, cuya relación se deterioró mucho el año pasado después de las críticas veladas del técnico hacia el delantero.
En el Atlético soñaban que el Chelsea ejerciera la opción de compra de 100 millones de euros que tiene sobre Joao Félix, pero lo cuatro goles en 25 partidos que ha anotado el portugués en Inglaterra no valen ese dinero. La opinión contraria de Mauricio Pochettino a la continuidad de Joao también ha pesado en la decisión de la nueva y multimillonaria propiedad ‘blue’ de no ofertar por su fichaje. Y ni siquiera renovar su préstamo, operación que habría estudiado el Atlético a pesar de que prefiere desprenderse de él definitivamente.