La Eurocopa demandaba una gran campanada y la dio Georgia, un país de solo cuatro millones de habitantes, una selección que nunca había estado en la cima de la máxima élite, más bien al contrario, pues se la consideraba hasta hace poco vagón de cola del fútbol europeo. Su victoria ante Portugal, es historia de este torneo y de este deporte.
La gesta le permitirá seguir viva en Alemania y medirse a España en octavos, ni más ni menos.
Tras plantar cara ante Turquía (1-3) y empatar ante República Checa (1-1), Kvaratskhelia conectó con su mejor versión contra Portugal.
Abrió el marcador en el minuto 2 para encarrilar un triunfo completamente histórico (2-0) que les daba el billete a los octavos de final. Fue elegido MVP tras una completa exhibición en la que, además de un gol, también completó todos los regates (3 de 3) y pases (9 de 9) que intentó y ganó 9 de los 13 duelos que disputó.
Por el momento, Kvaratskhelia está centrado en mantener su mejor versión y hacer historia con Georgia, que encara unos octavos de final muy ilusionantes contra España. ¿Serán capaces de plantar cara a los de Luis De la Fuente?