Se las prometía muy felices el Bayern cuando logró aquel estratosférico 9-2 frente al Dinamo de Zagreb en la primera jornada que levantó a todo el mundo del fútbol de sus asientos.
No era normal la voracidad de aquel equipo, como tampoco lo es que, a 6 de noviembre, el cuadro bávaro necesite ganar para no complicarse el pase a la próxima ronda.
Los de Kompany, por plantilla, están casi obligados a quedar entre los ocho primeros, y ahora no tienen ni asegurado el playoff.
El Bayern de Múnich necesita sumar de tres esta noche ante el Benfica si no quiere meterse en un buen lío en la Champions. Suman los de Kompany una victoria y dos derrotas en las tres jornadas disputadas hasta la fecha, una serie de resultados que le colocan en mitad baja de la tabla. De ahí que todo lo que no sea imponerse al tecer clasificaco de la liga portuguesa suponga un serio revés para los bávaros de cara a la clasificación directa a octavos, objetivo marcado en rojo en Múnich.